"LA MAYORDOMÍA" Info@Amén-Amén (4ª Parte)

Pues si en las riquezas injustas no fuisteis fieles,¿quién os confiará lo verdadero?Lucas 16:11.

Serie La Mayordomía: Dinero IV

Nuestra Actitud:
Dios no nos considera por lo que tenemos. A Él solo le interesa nuestra actitud (correcta) frente a las cosas. Él espera que en la abundancia o en la falta de dinero nosotros siempre le glorifiquemos. Debemos analizar nuestro comportamiento hacia Dios cuando somos poseedores de muchas cosas o cuando no lo somos.-

Debemos ser capaces de confiar en Dios en cada circunstancia, ya que es claro que Él conoce nuestra forma de actuar ante cualquier situación, tal como en abundancia como en lo contrario "Pues si en las riquezas injustas no fuisteis fieles, ¿quién os confiará lo verdadero? (Lc. 16:11). Dios usa el dinero como un medio de fortalecer una relación con Él. Debemos rendirnos a Él en esta área: "Porque donde está vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón" (Lc. 12:34). El dinero es amoral, no tiene virtud inherente, en la pobreza como en la riqueza: "A los ricos de este siglo manda que no sean altivos, ni pongan la esperanza en las riquezas, las cuales son inciertas, sino en el Dios vivo que nos da todas las cosas en abundancia para que las disfrutemos" (1ª Tim. 6:17); en ambas hay personas deshonestas, ya que Dios condenó el abuso o la preocupación (afan) y no la riqueza en sí: "Porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores" (1ª Tim. 6:10).-

Muchas veces hacemos planes sin consultar la voluntad directa de Dios, lo que viola el principio expresado en Mt. 4:7 que dice: "Jesús le dijo: escrito esta también: No tentarás al Señor tu Dios". No solo violamos el principio sino además no aceptamos la sabiduría de Dios como superior a la nuestra; además violamos otro principio, el de la Planificación, ya que Dios espera ayudarnos a crecer en nuestra vida espiritual, emocional y física: "Amado, yo deseo que tú seas prosperado en tods las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma" (3ª Juan 2).-
(continúa...)