viernes, 8 de febrero de 2008

"COMENCÉ A DAR GRACIAS" M.Nordtvedt(Cap. 8)

Con el descubrimiento de que Dios está en todo, me di cuenta de que debía dar gracias por todo. En efecto, a través de Pablo, Dios nos ordena que lo hagamos. "Den gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para ustedes en Cristo Jesús" 1ª Tesal. 5.18


Cuando los pensamientos tristes se amontonaban en mi mente al despertarme por la mañana, comenzaba a dar gracias a Dios por las bendiciones que antes había dado por supuestas: el sol (o la nieve o la lluvia), el nuevo día, mi familia, fuerza para hacer mi trabajo, el uso de mi mente y otras facultades, amigos, casa, alimentos, ropa. Le agradecí la cantidad de bendiciones espirituales que me había dado: un Salvador, perdón, paz con Él, vida eterna, guía diaria, la Biblia. Había también otras cosas por las que hubiera podido dar gracias si me hubiera detenido a considerar. En efecto, cuanto más lo pensaba, más larga se hacía mi lista.-


Gradualmente, en forma imperfecta al comienzo, comencé a dar gracias, no solo por las bendiciones evidentes, sino también por las cosas duras y difíciles de entender de mi vida. Mis épocas de depresión se hicieron cada vez menos frecuentes. Como un mes después que comprendí que Dios estaba en todo y comencé a dar gracias sinceramente, me dí cuenta de pronto que había salido de mi túnel, ¡ya no estaba deprimida!....


No puedo expresar la gratitud y alegría que llenaron mi corazón cuando me di cuenta de que los días de mi depresión habían pasado, ¡estaba otra vez al aire libre, en la luz! La vida volvió a cobrar interés y a ser valiosa para mí. El hastío se desvaneció. Es tan grandiosa la diferencia que causó en mi vida que resulta difícil creerlo.-


No aprendí a dar gracias perfectamente en un solo día. Todavía no lo he aprendido del todo. Pero estoy aprendiendo. Me repito continuamente los siguientes versículos de la Biblia:"Den gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para vosotros en Cristo Jesús" (1ª Tes. 5.18) "Dando siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre de nuestro Señor Jesucristo" (Efesios 5.20) "Bendeciré a Jehová en todo tiempo, su alabanza estará de continuo en mi boca" (Salmo 43.1) O, "Bendeciré al Señor. no importa qué ocurra" (Salmo 43.1 LBV).-


Me gustan los Salmos de David porque están llenos de alabanzas a Dios. Sin embargo, ¡piensa en todos los problemas que tuvo David, perseguido por Saúl y traicionado por su propio hijo!.-


Pablo es otro "alabador". ¿Recuerdas cuando él y Silas estaban en la carcel de Filipos? A medianoche oraban y cantanban a Dios, y Dios mandó un temblor para librarlos.-


En el Antiguo Testamento también se ve que Dios obraba en respuesta a las alabanzas. Antes de que el rey Josafat fuera a pelear contra el ejército de los moabitas y los amonitas, se encomendó él y su nación a Dios. Instó a su gente a que glorificara a Dios, y luego mandó a algunos a cantar alabanzas a Dios delante del ejército. ¡Esta era una fe sincera! "Y cuando comenzaron a entonar cantos de alabanza Jehová puso contra los hijos de Amón, de Moab y del monte de Seir, las emboscadas de ellos mismos que venían contra Judá, y se mataron los unos a los otros" (2ªCrónicas 20.22).- El Señor dió a Judá una gran victoria mientras alababan.-

Daré un ejemplo de nuestros días de cómo la alabanza puede cambiar las cosas. Una pareja cristiana, amigos nuestros, tenían un hijo completamente descarriado que había destrozado sus corazones por sus malas actividades. Oraban y oraban por su muchacho, pero nada parecía cambiarlo. Luego comenzaron a alabar a Dios, por supuesto, no por los pecados de su hijo, sino en fe, alabando a Dios por lo que Él iba a hacer con su hijo y por lo que estaba haciendo en sus vidas a través de esta prueba. Este hijo, que no había vuelto a la casa por todo un año, llamó a sus padres justamente dos semanas después que habían comenzado a alabar, y vino a casa a verlos. Aunque los problemas no estaban totalmente resueltos al momento de escribir este libro, estos padres estaban agradecidos por las evidencias de que Dios está manifestándose. Continúan alabando y creyendo en Dios por la victoria definitiva sobre Satanás.-

Una mujer cuyo corazón había sido destrozado por un esposo infiel, me confesó que no había tenido paz y victoria en su vida hasta que no se arrodilló y agradeció a Dios por su sufrimiento. Cuando finalmente dió gracias por esta experiencia dolorosa en su vida, el terrible dolor fue reemplazado por paz.-

Alaba al Señor en cualquier circunstancia es el título de una de los valiosos libros del francés Gardner Hunter. Escribí esta frase sobre el fregadero de mi cocina, para poder verlo todos los días. Algunas veces me olvido de alabar, pero cuando me acuerdo, hasta las situaciones más feas se hacen sufribles, y el día más negro se vuelve luminoso.-
Este año, cuando se aproximó el período de las vacaciones, apenas si podía esperar para partir. Me imaginaba a mí misma al lado de un hermoso lago, nadando, escalando, leyendo y tomando sol. Pero las cosas no salieron como esperábamos. El lago era hermoso, pero demasiado frío para bañarse. El viento también era frío y el sol se escondía detrás de las nubes casi todo el tiempo. Había un charco de agua en el vestuario del camping, así que cada vez que uno entraba se empapaba los pies. ¡Y se veían más mosquitos de los que jamás había visto en mi vida!
Después de algunos días ya habíamos aguantado lo suficiente. Así que nos fuimos a otro lago. Este lugar también era hermoso, pero llovía torrencialmente. Tiritábamos dentro de nuestra carpa húmeda. ¿Sabes lo que me dijo el Señor cuando comencé a ponerme de mal humor por nuestra mala suerte? "Piensen en todo aquello por lo cual pueden alabar a Dios y estar contentos" (Filipenses 4.8 LBV).- Así que, con pocas ganas al comienzo, comencé a hacer mentalmente una lista, y a alabar a Dios. Cuando me dí cuenta de lo mucho por lo cual podía dar gracias a Dios y estar contenta, ¡nuestra carpa con goteras ya no me importaba tanto! ¡Acampar bajo la lluvia se convirtió en una aventura! (Bueno, casi.) Al menos tuve una oportunidad para leer mucho.-
(Continuará el final del capítulo 8)


1 comentario:

Maricarmen dijo...

El comentario es muy bueno.
Cuando no vemos a DIOS en todo, intentamos solucionar y controlar nuestra vida, los problemas, a los demás; cuando vemos que no es posible nos deprimimo o tomamos decisiones equivocadas. En todo caso, no albamos a DIOS que lo merece y no dejamos que las circunstancias y pruebas que están bajo el control soberano de EL nos moldeen y fortalezcan, nos hagan conforme a la imagen de su Hijo.